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Libro sobre enfermedad neurológica
Esclerosis múltiple es causa común de discapacidad neurológica en adulto joven

La publicación es la primera a nivel continental escrita en español sobre una enfermedad crónica cuyo origen y causas son aún desconocidas, pero que de no ser tratada a tiempo puede incluso provocar la invalidez del paciente.


Prof. Dr. Jorge Nogales-Gaete.
A pesar que la esclerosis múltiple es una de las causas más comunes de discapacidad neurológica en el adulto joven, a nivel latinoamericano no existía un libro en español que se centrara en el análisis de esta enfermedad. De ahí que los profesores doctores Camilo Arriagada R. y Jorge Nogales-Gaete, neurólogos de la Universidad de Chile, decidieran organizar un trabajo de cooperación nacional e internacional, cuyo producto final es la obra “Esclerosis Múltiple: Una Mirada Ibero-Panamericana”.

El libro tiene todos los atributos para ser considerado una referencia obligada tanto para especialistas del área, como para profesionales de la salud en general. A lo largo de sus 33 capítulos, cuarenta y ocho connotados neurólogos provenientes de Argentina, Brasil, Chile, Croacia, Cuba, España, Estados Unidos, México, Reino Unido y Uruguay, presentan el tema en forma reflexiva, actualizada, sistematizada y profusamente ilustrada. Dentro los autores extranjeros, destacan Ian McDonald, Charles, M. Poser, Lawrence Jacobs y Oscar Fernández.

En una actitud novedosa, el documento busca satisfacer no sólo a los profesionales del ámbito médico, sino también a los afectados de Esclerosis Múltiple (EM) y sus familiares, incluyendo material expresamente preparado para ellos, con información sobre la enfermedad, sobre los modelos de agrupaciones sociales de pacientes y además proporciona una selección de direcciones de sitios Web relacionados con el tema, para una permanente actualización.

“Los textos originados por autores de mundo occidental más desarrollado, son muy útiles para seguir los avances de esta dolencia, pero por razones obvias no dan cuenta de nuestras particularidades: cultura, raza, latitud, organización del sistema sanitario, seguros de salud, infraestructura diagnóstica y posibilidades de acceso al tratamiento, son aspectos donde tenemos significativas diferencias. Es por eso que asumimos este trabajo, donde hemos agregado a lo propio del “estado del arte” sobre la enfermedad, algunos matices producto de la reflexión de nuestra particular experiencia latinoamericana”, explica el Prof. Dr. Jorge Nogales-Gaete, Jefe del Servicio de Neurología del Hospital Barros Luco Trudeau y Director del Departamento de Neurología del Campus Sur de la Facultad de Medicina de la Uiversidad de Chile


Una enfermedad curiosa

Así como un cable de electricidad está compuesto por alambres de cobre envueltos en una funda plástica, las fibras nerviosas del organismo están recubiertas por una sustancia llamada mielina, su función es optimizar la transmisión de los impulsos eléctricos a lo largo de todo el sistema nervioso. Cuando la mielina se daña en un punto, la transmisión nerviosa en ese segmento se lentifica o se interrumpe, por lo que el mensaje no llega adecuadamente a la parte del cuerpo correspondiente. Un fenómeno como este, que ocurre en la Esclerosis Múltiple (EM), da cuenta de muchas de sus manifestaciones.

No se sabe con certeza la causa, pero sí sobre los mecanismos involucrados en el desarrollo de esta enfermedad. El sistema inmunológico (preparado para defendernos de agentes extraños, especialmente infecciones) presenta una alteración y lesiona estructuras propias del organismo como la mielina. Por algún error, no la reconoce como propia, la ataca y daña, provocando inicialmente inflamaciones zonales, luego placas de desmielinización y posteriormente remielinización o daño axonal, en distintas áreas del cerebro y la médula espinal.

Hasta el momento, no se sabe qué causa esta equivocación, ni cómo la mielina llega a convertirse en blanco del sistema inmunológico. No obstante, se piensa que debe existir una predisposición genética, pues familiares de personas con EM tienen un riesgo relativo 10 a 50 veces más frecuente de sufrir la enfermedad que la población general (la concordancia entre gemelos monozigotos es de 40% en tanto en los mellizos dizigoticos es solo 4%). En el ámbito genético se ha puesto especial atención a una zona del brazo corto del cromosoma 6, que codifica secuencias para el complejo mayor de histocompatibilidad. Los investigadores también presumen la presencia de un factor ambiental, desconocido, que podría ser un virus.

“Los niños que emigran antes de la pubertad de una zona templada a una ecuatorial o viceversa, adquieren el riesgo de la zona a la cual emigran. No es el mismo caso de los adolescentes y mayores, quienes conservan las características de riesgo de la zona donde han nacido. Estos antecedentes por un lado apoyan la participación de algún factor ambiental (agente o condición) y además sugieren a las edades tempranas de la vida como las mas vulnerables, para que el contacto con este y otros factores de alguna manera favorezcan o inicien la enfermedad, en aquellos individuos genéticamente susceptibles” indica el Prof. Dr. Nogales-Gaete.

Mientras en Estados Unidos y Europa tienen tasas de prevalencia de 100 pacientes por cada 100 mil habitantes, en Chile sólo se presentarían de 10 a 20 casos por cada 100 mil habitantes, de ahí que los académicos sostengan que tal vez existan en nuestro país y en otras zonas del continente más casos de los que se cree “Nosotros tenemos latitudes homólogas en cuanto a distancia de la línea del Ecuador, respecto de Estados Unidos, y existe una aparente diferencia de prevalencia, el desafío es ver si esto es efectivamente así”, señala el académico. Trastornos en la movilidad, en la visión, en el habla, problemas de equilibrio, fatiga, temblor y hormigueos en brazos y piernas, son algunas de las diversas manifestaciones clínicas de esta dolencia que afecta básicamente a adultos jóvenes de entre 25 y 40 años, en su mayoría mujeres y que de no ser tratada adecuadamente puede incluso provocar discapacidad en el enfermo. “La enfermedad tiene muchas potenciales manifestaciones, magnitudes y formas de evolución, las primeras pueden ser muy transitorias y aparecer como curiosas producto de la coexistencia de zonas comprometidas aledañas a otras sanas. Así es fácil, que algunas expresiones puedan pasar inadvertidas o ser interpre- tadas como parte de otros males o incluso que se crea que la persona está pasando por un período de estrés psicológico” aclara el Prof. Dr. Nogales- Gaete.

La técnica auxiliar más útil para el diagnóstico de EM es la Imagen por Resonancia Magnética (IRM). Dicho método radiológico permite identificar no sólo las lesiones del cerebro y la médula espinal, sino además su tamaño, localización y momento evolutivo.

Otra prueba de gran ayuda son los Potenciales Evocados Visuales (PEV), que ayudan a descubrir los bloqueos o placas en el nervio óptico. Por último, está el estudio de Bandas Oligoclonales en Líquido Cefalorraquídeo (LCR).


Tratamiento

Si bien la EM aún no tiene cura definitiva si es posible modular la progresión así como mejorar los síntomas. En los tratamientos denominados de inmunomodulación el más utilizado es con el interferón beta-1ª.Sin embargo, en nuestro país sólo una minoría tiene acceso a ellos, ya que ni el sector público ni la mayoría de las Isapres considera este tratamiento que tiene un costo anual entre 6 mil a 8 mil dólares. De ahí que para el Prof. Dr. Camilo Arraigada R., fundador del Departamento de Neurología del Campus Sur de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile y actual Jefe del Servicio de Neurología y Neurocirugía del Hospital del Trabajador, otro objetivo central del libro fue sensibilizar a la ciudadanía, mediante la información que entrega, en cuanto sea un paso para lograr una mejor atención médica y por ende una mejor calidad de vida de los pacientes.










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