NOTAS

(1) A Altazor se le puede asignar o descubrir una estructura –o varias- a partir de la "tensión constructiva" "entre dispersión y unidad, entre fragmentarismo e integración" como lo señala Cedomil Goic en su nota sobre "Altazor: establecimiento del texto, introducción y notas", inserta en este volumen. Pero creo que esta posibilidad de estructuras – u organización o sentido- se constituye en el interior de la ontoteología, pensando, trabajando dentro des sus límites y no (acaso ilusoriamente) tratando también de sobrepasarlos, colocándose

cerrar

 

 

 

(2) R. de Costa, Huidobro: los oficios de un poeta (México, FCE, 1984, pp. 186-187) señala que Huidobro habría hecho esta declaración en La Correspondencia de España, Madrid (24. 11. 1919).

cerrar

 

 

(3) He aquí algunas anticipaciones: 1) "Altazur: fragmento de Un viaje en paracaídas", trad. De Juan Emar, La Nación, Santiago (29. 04. 1925); 2) "Poema", Panorama, Santiago (abril de 1926). Reproducido en La poesía chilena moderna, de Rubén Azócar ( ed.), Santiago, Pacífico del Sur, 1931, pp. 158-159. Aparece modificado en Altazor, Canto IV; 3) "Venus", Favorable Paris Poema, Paris, 2 (octubre de 1926). Modificado en el canto IV; 4) "Fragment d’ Altazor", transition, Paris, 19-20 (junio de 1930). También modificado en Altazor.

Antes o después o fuera de ellos, en el nivel de otra lectura, posibilitada, hoy en día, por la conjunción de la escritura, el texto y sus contextos actuales, en un esfuerzo por abrir la clausura ontoteológica de los signos. En este sentido, las diversas interpretaciones cristianas con sus pretensiones totalizantes –y a veces explícitamente excluyentes- serían reducciones de la heterogeneidad que intenta o desea ardiente y lúdicamente alcanzar Altazor. Desde este punto de partida –no excluyente- la negación de asignarle una estructura única al poema es parte de los actos para abrir el espacio y el tiempo -distinguir las fallas- para que no aparezca el (no)fundamente o ni siquiera se vislumbre.

Este ensayo, entonces, no pretende ser exhaustivo, -no trata por ejemplo, del dialogismo de la obra ni de la presencia y significado de la amada- sino crear unas condiciones para crear una lectura distinta a las lecturas contenidas en la ontoteología y, de hecho, el logocentrismo excluyente. Muy importante para sostener esta perspectiva, me parece la observación de R. de Costa –Huidobro: los oficios de un poeta, México, FCE, 1984, p. 195- de que "el poema sigue eludiendo toda interpretación que lo abarque en su totalidad. Tan es así que hoy mismo, aunque hay consenso en cuanto a su importancia, no hay con respecto al por qué".

cerrar

 

 

(4) Enrique Lihn: "Pensar a Huidobro", Unión, La Habana, 3 (1968), p. 83.

cerrar

 

 

(5) Kenneth Anger, Hollywood Babilonia, Barcelona, Tusquets, 1985, p.24.

cerrar

 

 

(6) Hugo Friedrich, Estructura de la lírica moderna, Barcelona, Seix Barral, 1974 (ed. orig. 1956), 82 y ss.

cerrar

 

 

 

(7) O. Bloch y W. von Wartburg, Dictionaire etymologique de la langue francaise, Paris, PUF, 1964 s.v. azur.

cerrar

 

 

 

(8) J.M. Ibáñez Langlois, Poesía chilena e hispanoamericana actual, Santiago, Nascimento, 1975, p.115.

cerrar

 

 

 

 

(9) Friedrich Nietzche, cit. por L.A. Salomé, Nietzsche, Madrid, Zero Zyx, 1978, p. 59.

cerrar

 

 

(10) Guillermo Sucre, La máscara y la transparencia, Caracas, Monte Avila, 1975, pp. 101-127, esp. p. 122.

cerrar

 

(11) Vicente Huidobro, "La poesía", en: Temblor de cielo, Madrid, Plutarco, 1931. Cit. de ed. de 1942 (Santiago, Cruz del Sur), p. 10. La segunda cita en "El creacionismo" (Maniféstes, 1925) cit. de V. Huidobro, Obras completas, Santiago, Zig-Zag, pp. 675-677.

cerrar

 

 

(12) Vid. G. Yúdice, Vicente Huidobro y la motivación del lenguaje, Buenos Aires, Galerna, 1978, p. 287.

cerrar

 

 

 

(13) Vicente Huidobro, Temblor de cielo, Santiago, Cruz del Sur, 1942, pp. 9-10 y 12.

cerrar

 

 

 

(14) Vicente Huidobro, idea expuesta en: "Manifiesto de manifiestos" (1925), cit. de Obras completas, Santiago, Zig-Zag, 1964, pp. 661-672.

cerrar

 

 

 

(15) Lautreamont, Les Chants de Maldoror, VI, 3. Cit. de I.D. Comte de Lautreamont, Les Chants de Maldoror, Paris, Gallimard, 1973, ed. de J.M.G. Le Clézio, p. 234.

cerrar

 

 

 

(16) Lautreamont, op. cit. I, 12, p. 49.

cerrar

 

 

 

 

 

(17) Algunos trabajos que estudian las formas lingüísticas y las estructuras poéticas: C. Goic, La poesía de Vicente Huidobro, Santiago, AUCH, 1956; G. Yúdice, Vicente Huidobro y la motivación del lenguaje, Buenos Aires, Galerna, 1978; C. Goic: Prólogo a Altazor, Valparaíso, ed. Universitarias, 1974, pp. 7-17; C. Goic, "La comparación creacionista: Canto III de Altazor", Revista Iberoamericana, 106-107 (1979), pp. 129-139 ; A. Nordenflycht: "Altazor, poesía y antipoesía", Signos, Valparaíso, 16 (1988) pp. 39-64; B. Castro Morales: Altazor. La teoría liberada, Santa Cruz de Tenerife, Ed. Pilar Rey, 1987, etc.

cerrar

 

 

 

 

 

(18) Pierre Reverdy, "L’image" Nord-Sud, Paris, 13 (Marzo 1918), s.p.; André Breton, Manifeste du Surréalisme (1924), en Manifeste du surréalisme, Paris. Gallimard, 1973, p. 31.

cerrar

 

 

 

 

 

(19) F.T. Marinetti, "Manifesto técnico della letteratura futurista" (1912), en L. de Maria (ed.) Marinetti il futurismo, Milano, Mondadori, 1973, pp. 77 y ss.

cerrar

 

 

 

(20) G. Apollinaire, "L’ esprit nouveau et les poètes", NRF, 491 (1918), p. 25 y ss.

cerrar

 

 

 

 

(21) Ahora: Vicente Huidobro, Altazor, ed. Facsimilar del manuscrito, Santiago, Banco del Estado de Chile, 1999. Ed. de Andrés Morales.

cerrar

 

 

(22) Federico Schopf, "Introducción", Pablo Neruda, Residencia en la tierra, Santiago, Ed. Universitaria (1ra ed. 1992), 1996, pp. 13-32. También "Una lectura finisecular de Neruda", en Inke Gunia, Katharina Niemeyer, et al., La difícil modernidad: literatura latinoamericana, Frankfurt, K.D.Vervuert, en prensa.

cerrar

 

 

 

(23) Creo que este –colonizar temporalmente la eternidad, temporalizarla- es uno de los sentidos de "Las palabras con fiebre y vértigo interno/ las palabras del poeta dan un mareo celeste.../ epidemia de rosas en la eternidad" (Canto I, 568 y ss.)

cerrar

 

 

 

 

(24) Para el falso sublime ver ya los comentarios del Pseudo-Longino, De lo sublime, III, 2, en trad. De J. García Lopez, Madrid, Gredos, 1979, p.153.

cerrar

 

 

 

 

 

(25) J. Deleuze, Nietzsche y la filosofía, Barcelona, Anagrama, 1971, p.103.

cerrar