Debate Universitario N°18 - Universidad de Chile

Comité Editor: Mesa Senado Universitario / Edición General: Rocío Villalobos, Encargada de Comunicaciones Senado Universitario Periodistas: Daniel Dedes, Claudia Montecinos, Jorge Águila y Rocío Villalobos / Diseño y Diagramación: César Ramírez / Fotografías: VAEC, VEXCOM, César Ramírez, Rocío Villalobos, Claudia Montecinos Senado Universitario: Un espacio estratégico de convergencia Por la Senadora Universitaria María Patricia Gómez Académica del Hospital Clínico de la Universidad de Chile. Las universidades nacen para ponerse al servicio de las sociedades donde se insertan y dar solución a los problemas emergentes de su entorno. La Universidad de Chile, cier- tamente, ha jugado un rol fundamental en el desarrollo de la sociedad chilena; su his- toria es casi la de nuestra República, adop- tando siempre, aun durante situaciones di- fíciles o conflictivas, un rol protagónico en la búsqueda de soluciones. Después del retorno de la democracia, surge en la Universidad una acción colectiva y or- ganizada que abre la puerta a la generación de nuevos estatutos, a la recuperación de su autonomía y al nacimiento de un órgano tri- estamental encargado de la función normati- va : el Senado Universitario. Este Senado pronto se convierte en un espa- cio estratégico, donde convergen una mul- tiplicidad de disciplinas, intereses y visiones diversas, siendo ésta, precisamente, su máxi- ma fortaleza, que resulta fundamental para el cabal cumplimiento de la misión de la Uni- versidad de Chile. Además de constituir un espacio de reflexión, este órgano normativo cumple también un importante rol aglutina- dor . Ayuda a mirar a la Universidad como un todo, a potenciar las relaciones entre sus unidades y entre todos sus miembros , realzando la importancia del trabajo en equi- po, multidisciplinario; entendiendo que las visiones múltiples y diferentes enriquecen las propuestas y dan mayor fuerza a las ideas. Articula a la comunidad, da espacio a la vida colectiva, buscando construir una universidad que permanezca en diálogo constante con su interior y con su entorno. Al Senado actual le ha correspondido enfren- tar grandes desafíos, como entregar un nuevo Reglamento de Remuneraciones –que busca mayor equidad-; defender los derechos de los investigadores postdoctorales; abogar por la generación de una Defensoría Universitaria, propiciar Políticas anti-acoso Laboral y Sexual al interior de nuestra universidad, reflexionar so- bre la relación Universidad/Empresa y trabajar arduamente en la generación de un nuevo Pro- yecto de Desarrollo (PDI) para la Universidad de Chile, por nombrar solo algunos. También ha debido reflexionar y pronunciarse acercadeproblemasparticularmente importantes para el país, como son: la Reforma a la Educación Superior; la creación del Ministerio de Cultura, el financiamiento de la institucionalidad científica y la Ley de Universidades Estatales. Quedan aún tareas pendientes, como el tan necesario cambio deestructuradel Hospital Clínicode laUniversidad de Chile, que haciendo honor a su nombre y con- siderando lomultidisciplinario de sus servicios y lo complejo de su funcionamiento, debiera servir de campo de práctica de varias facultades de nuestra universidad, las que podrían contribuir a su mejor gestión; favorenciéndosede estemodo, todas de suflorecimientoydesarrollo.Esperamospoderim- pulsar pronto este cambio. Las discusiones en las plenarias no siempre son tranquilas; más de alguna vez ha subido el tono de los discursos, señal de la pasión que ciertos temas generan. Lo importante es man- tener siempre claro el norte, evitando mezclar en la discusión aspectos que se aparten del objetivo primordial de una universidad: la búsqueda del bien común . Tener siempre presente el PDI de la Universidad de Chile, su misión y el espíritu que la originó , debe constituir un imperativo. La sociedad mundial vive hoy situaciones com- plejas. Si recordamos el rol primordial de las universidades, debemos asumir la responsabili- dad que nos compete como miembros de una comunidad universitaria. Por tradición, el apor- te de la Universidad de Chile no se confina a la academia pura; sino que abarca también la bús- queda constante y permanente de múltiples y diversos espacios de socialización e interacción con sumedio para encontrar soluciones innova- doras que se ajusten a necesidades reales. Se acerca a pasos agigantados el final de este período de legislatura universitaria 2014-2018. Estos casi 4 intensos años formando parte del Senado Universitario además de permitir co- nocer gente valiosísima, han sido de profundo y permanente aprendizaje. Fueron surgiendo motivaciones más allá de las iniciales y apare- ciendo nuevas metas que traspasaron la ba- rrera de lo meramente académico. Vistos los graves problemas que enfrenta hoy la sociedad mundial y nacional, más que nun- ca se hace necesario buscar, desde la Univer- sidad de Chile, soluciones que puedan ayudar a construir una sociedad mejor. Los tiempos cambian, pero nuestra Universidad sigue siendo generadora del potencial humano que Chile requiere para dar solución a sus pro- blemas emergentes. Es por esto que quisiera invitar a todos los académicos, estudiantes y funcionarios idealistas de esta universidad a postular al próximo Senado Universitario para ayudar desde aquí, a construir una Universi- dad, un Chile y un mundo mejor 2

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