El diagnóstico y tratamiento de las pacientes postmenopáusicas con coronarias normales, pero con angina persistente, en muchas ocasiones constituye un reto para el cardiólogo de asistencia. Los métodos de diagnóstico no invasivo que sugieren la presencia de isquemia miocárdica tienen limitada utilidad debido a la presencia de diferencias anatómicas y artefactos técnicos específicos de las mujeres.
Objetivo: Evaluar la presencia de enfermedad coronaria microvascular en mujeres postmenopáusicas.
Material y Método: Se incluyeron 26 pacientes (edad media: 56±7 años) con angina típica y coronarias angiográficamente normales. A todas se les realizó gammagrafía de perfusión miocárdica con tecnecio-99m metoxi-isobutil-isonitrilo con el protocolo siguiente: primer día: estrés físico en bicicleta ergométrica o combinando estrés físico y 0,56 mg/kg de dipiridamol endovenoso si no se alcanzaba mediante el ejercicio el 85% de la frecuencia cardíaca máxima calculada; segundo día: estudio en reposo (separados no más de 48 horas); estudio de función endotelial medida mediante ultrasonografía a nivel de la arteria braquial; registro electrocardiográfico ambulatorio de 24 horas (Holter) y lipidograma.
Resultados: El índice promedio de masa corporal fue 28±4 (sobrepeso) y el índice cintura-cadera fue de 0.83±0.05. En cuanto a la presencia de factores de riesgo, sólo una paciente era fumadora (4%), pero 15% eran ex-fumadoras, 31% diabéticas, 40% dislipidémicas y 77% hipertensas. El 62% de las pacientes experimentaban angina mixta, un 19% predominantemente en estrés y el 19% restante sólo en reposo. Se constató anemia en una paciente. En ocho casos se detectaron defectos de perfusión reversibles en la gammagrafía, todos localizados en los territorios anteroapical y septal, los que en la mitad de las ocasiones coincidieron con la presencia de disfunción endotelial, pero no con isquemia durante el registro electrocardiográfico de Holter. Se demostró disfunción endotelial en un 40% de las pacientes. El 58% de las pacientes presentó hipertrigliceridemia, que en cuatro casos coincidió con HDL baja; sin embargo, no hubo casos de colesterol elevado. Sólo en dos pacientes en quienes aparecieron alteraciones en la perfusión se constataron dislipidemias. Durante el registro de Holter un 12% presentó isquemia ambulatoria asociada con arritmias supraventriculares, un 35% presentó arritmias supra- o ventriculares en forma de contracciones prematuras y un 7%, bloqueo de rama izquierda intermitente.
Conclusión: En mujeres postmenopáusicas con angina típica y coronarias angiográficamente normales debe tenerse en cuenta como posible causa de sus síntomas la isquemia por enfermedad coronaria microvascular, que puede acompañarse de alteraciones en la perfusión miocárdica y disfunción endotelial.