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Memoria Dirección de Bienestar Estudiantil- Universidad de Chile
Actualmente tengo 22 años. Estudio Arquitectura en la
Facultad de Arquitectura y Urbanismo (FAU) de la Universidad
de Chile. En 2013 realicé mi seminario de investigación, que
dentro de la malla corresponde a quinto año.
Aparte de los estudios, participo en un proyecto Fondart
con una docente de la Facultad sobre arquitectura escolar
moderna en la zona central. Y además trabajo como monitora
virtual en la Dirección de Comunicaciones de la Universidad.
Cursé toda mi Enseñanza Básica y Media en el Colegio
Inmaculada Concepción de San Fernando. Fue importante mi
paso por ese lugar ya que no sólo aportó en mi formación
académica, sino que también en lo personal.
Elegí estudiar en la Universidad de Chile por la calidad de
su educación, pero sobre todo por su pluralismo. Conocer
personas de todo Chile y de diferentes realidades ha hecho
de mi paso por la universidad una de las mejores etapas de
mi vida.
Para mí, la educación pública es fundamental para la
construcción de una sociedad. Creo que en todos los niveles
se debería garantizar la calidad en la educación para crear un
país más justo y lleno de oportunidades para todos quienes
vivimos en él. No es posible que sólo quienes puedan pagar
sean los que logren una formación integral.
Personalmente, me enteré de la posibilidad de optar a becas
para mis estudios superiores por la orientadora de mi colegio.
Postulé a todas. Sin embargo, la Beca Excelencia Académica
fue el único apoyo que recibí del Estado –aunque al momento
de publicarse los resultados de la Prueba de Selección
Universitaria, no fui favorecida y tuvimos que apelar, dado
que entré a la universidad junto con mi hermano. Después de
eso sí se nos asignó–. Tenía todas mis expectativas puestas en
esa beca y recibirla fue un gran reconocimiento a mi esfuerzo
durante toda la Enseñanza Media. De no haberla recibido,
quizás no hubiese podido estudiar.
Tener la beca fue una tranquilidad al principio porque sabía
que tenía una base para estudiar. Sin embargo, al entrar a la
Universidad sentía gran presión por mantenerla. Pero una vez
que tomé el ritmo y con mucho esfuerzo logré pasar todos
mis ramos, sentí un gran alivio al saber que podría seguir
estudiando.
También recibo la Beca del Programa de Atención Económica
(PAE), que es una gran ayuda todos los meses sobre todo
porque constantemente hacemos maquetas o “ploteamos”
nuestras láminas.
Hay varias áreas que me interesan de la arquitectura, pero
una vez que termine la carrera tengo claro que quiero
aportar en la creación de un mejor país. Uno de mis planes es
especializarme fuera y volver a trabajar acá porque aún hay
mucho que hacer, hay muchas oportunidades.
Kim Díaz
Foto: Macarena Rivas
KIM DÍAZ
Beneficiaria de la Beca Excelencia Académica.
“Una vez que termine mi carrera tengo claro que quiero aportar en la creación de un mejor
país”
BENEFICIARIO BECA
