Beauchef Magazine - Especial recursos hídricos - Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas

Sobreexplotación de un recurso hídrico invisible En nuestro país, la escasez hídrica se hace evidente tan solo al ver la disminución del agua en los cauces de ríos, en los caudales de lagos o en la reducción de los glaciares. Sin embargo, esto nos muestra solo una parte del problema. La sequía por el cambio climático, el sobreuso y la mala gestión de estos recursos también han afectado a las aguas subterráneas, una fuente importante que, sin el conocimiento ni una regulación adecuada, puede llevarnos a tropezar con la misma piedra. Por Andrea Dávalos Osorio S aber que, según Unesco, aproximada- mente el 99% del agua dulce en es- tado líquido del planeta se encuentra en las napas subterráneas puede ser esperanzador ante un escenario de sequía, sobre todo en Chile, donde la crisis hídri- ca lleva afectando al territorio desde hace más de diez años. De hecho, por este motivo y por la creciente demanda, su extracción se ha hecho cada vez más recurrente en nuestro país; sin embargo, esta solución tampoco es la panacea. Según el Informe mundial de las Naciones Uni- das sobre el desarrollo de los recursos hídricos 2022, en relación con las aguas subterráneas, “ a pesar de su enorme importancia, este recurso natural no se suele comprender lo suficiente y, por consiguiente, se subestima, se gestiona mal e incluso se sobreexplota ” . Desde el 2017, la doctora en Hidrogeología, aca- démica del Departamento de Geología de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile y directora académica del Centro Avanzado para Tecnologías del Agua Aguas subterráneas: (Capta), Linda Daniele, junto a investigadores e investigadoras y estudiantes, ha encabezado una línea de estudio sobre las aguas subterrá- neas de nuestro país, donde busca caracterizar el estado del agua y los acuíferos —formaciones geológicas compuestas por rocas permeables que permiten almacenar y transferir agua en sus poros, fisuras o grietas— en la zona central. La investigación se está desarrollando en el sector de San Felipe, Región de Valparaíso, y se ha enfocado en la circulación de agua en roca fracturada. “ Nos dimos cuenta de que errónea- mente se consideraba a toda la cordillera, tanto de la Costa como la de los Andes, con una baja o nula importancia hidrogeológica, es decir, se descartaba como un ambiente propicio para la circulación y acumulación de agua subterrá- nea ” , indica Linda Daniele, quien además es investigadora principal del Centro de Excelencia en Geotermia de los Andes (CEGA). Al ser Chile un territorio geológicamente activo, la cordillera de los Andes contiene fallas y redes de fracturas que aumentan la permeabilidad de las rocas, adquiriendo propiedades hidrogeoló- gicas que favorecen el ingreso y la circulación de aguas subterráneas. “ Pudimos establecer cómo las fracturas permiten, en algunos casos, que el agua baje hasta los valles. También, que en la zona donde fracturas y fallas se interse- can, crean un volumen de roca favorable a la circulación y transferencia de agua desde las zonas altas, y que los valles de media monta- ña, así como los manantiales, tienen un rol im- portante en el recorrido del agua desde la alta montaña y su traslado hacia cotas menores ” , explica, agregando que, por tanto, “ no podemos simplemente separar los acuíferos —cuyo límite estaba sesgado a los materiales detríticos de los valles— de la cordillera de los Andes. Hay una dependencia de esos acuíferos, de los procesos de recarga que ahí ocurren de manera natural ” . Con estos resultados han podido avanzar en la creación de un modelo conceptual sobre la hi- drodinámica de estos acuíferos. “ La configu- ración hidrogeológica que hemos visto en San ESPECIAL 16

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=