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PRESENTACIÓN DE LOS DIRECTORES
DE LA INICIATIVA BICENTENARIO
La presente publicación contiene un relato de los hechos relevantes del
segundo año de ejecución de la Iniciativa Bicentenario de Revitalización
de las Humanidades, las Artes, las Ciencias Sociales y de la Comunica-
ción en el Campus Juan Gómez Millas de la Universidad de Chile. Este
proyecto –que tuvo partida oficial en noviembre de 2010, pero cuyo
diseño implicó un trabajo de cuatro años– busca llevar estas disciplinas
al más alto nivel de excelencia, eficiencia, pertinencia y pluralismo,
irradiando positivamente sobre todo el sistema universitario público.
Organizado a partir de los cuatro objetivos estratégicos de la Iniciativa
-Fortalecimiento y Renovación Académica, Mejoramiento de la Gestión
Académica y Administrativa, Infraestructura Integrada de Campus e
Irradiación y Vinculación con el Medio Social-, este anuario muestra los
logros y desafíos de este proceso de mejoramiento que abarca todas
estas dimensiones institucionales.
Los dos primeros años de la Iniciativa se caracterizaron por fortalecer
las capacidades instaladas: aumento de académicos con grado de
doctor, adquisición de libros, diseño y comienzo de la ejecución de Plan
Maestro de Infraestructura de Campus, concursos para la asignación de
fondos de creación artística e investigación, programa de profesores
visitantes, entre otros.
Estos programas han ido, poco a poco, avanzando en la perspectiva
de lograr la transformación del Campus en una entidad integrada con
intereses y trabajos que se desarrollen de manera mancomunada.
Los avances son fruto de la discusión colectiva, donde, a través del
diálogo se logró definir las necesidades y las soluciones a estas,
en un proceso donde han participado cientos de personas, directa
e indirectamente, a las cuales debemos agradecer tal apoyo como
directores de la Iniciativa.
Para el siguiente periodo, se espera que este proceso siga consoli-
dándose, dando paso a la innovación y dinamización efectiva de las
diversas actividades de la vida universitaria, y además, el año 2013
representa un punto de inflexión en este gran proyecto, evidenciando
los frutos del proceso de innovación curricular, específicamente con
el rediseño de mallas curriculares en varias carreras. Así mismo, con la
consolidación de los fondos y los núcleos de investigación y creación
y el trabajo disciplinar.
De esta forma, se busca ampliar la mirada respecto a las disciplinas
involucradas en la Iniciativa Bicentenario, no sólo fortaleciendo el trabajo
que éstas realizan, sino que propiciando la interdisciplina para abordar
temáticas nuevas o que traten de situaciones sociales complejas y que
se pretende sean difundidas no solo en ámbitos académicos sino al
entorno social.
Los desafíos del próximo periodo son procurar la proyección interna-
cional de las disciplinas, particularmente en el contexto latinoamericano.
Así mismo, se trabajará en la misión extensional de la Universidad,
ejecutando en forma creativa una vinculación pertinente con el medio
social, particularmente con el sistema educacional público.
En el ámbito de infraestructura, continuará el foco en la elevación de
la calidad de vida de académicos, funcionarios y estudiantes, tanto en
espacios comunes como aularios, biblioteca y campus deportivo; como
en la apertura al entorno inmediato, con la construcción de la Plata-
forma Cultural. Este desarrollo supone el buen uso de estos espacios
a través de un modelo de gestión integrada de campus; el incremento
del acervo bibliográfico, audiovisual y documental, y la provisión de los
medios tecnológicos que aseguren las mejores condiciones de trabajo
para académicos, estudiantes y funcionarios.
Como todo proceso estratégico, la ejecución de cada arista de la
Iniciativa Bicentenario ha incluido una evaluación permanente y un
análisis de los resultados, derivando en un proceso de aprendizaje
conjunto, basado en la retroalimentación entre la comunidad y los
ejecutores del proyecto, cuya mayor complejidad es su amplio abanico
de acciones, abarcando todas las dimensiones institucionales. Parte de
esta evaluación involucrará a pares externos tras el final del tercer año
de ejecución del proyecto.
Este desafío, sin precedentes inmediatos, hace de él un caso modelo
que acentúa su responsabilidad, no solamente para la Universidad
de Chile, sino que también para las otras universidades estatales con
convenios de desempeño que tienen proyectos con un carácter similar
(Universidades de Tarapacá, de Valparaíso, de Talca, de la Frontera y
de Magallanes).
Esperamos, de la misma forma, que esta consideración de las Huma-
nidades, las Artes, las Ciencias Sociales y las Comunicaciones, permee
hacia la educación pública en su conjunto y que el país reconozca en
estas disciplinas una parte relevante de los intereses del compromiso
ciudadano y el desarrollo humano y social, todo esto basado en el
principio de una sociedad que entienda como algo vital estas disci-
plinas y su desarrollo.
Pablo Oyarzun Robles
Loreto Rebolledo González
