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Secretaría Técnica PDI – Dirección de Planificación y Desarrollo
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PRESENTACIÓN
Con un profundo sentido de orgullo institucional y de compromiso con el futuro de la Facultad de
Medicina de la Universidad de Chile, nos complace presentar a la comunidad el Proyecto de Desarrollo
Institucional (PDI) que orientará nuestro quehacer hasta el año 2025.
Dar cuenta de sueños, ideas, valores y objetivos, en un documento que por un lado reflejara nuestra
diversidad y a la vez fuera coherente con la institucionalidad, es un logro mayor del cual todos nos
sentimos parte, más aún cuando las características de esta construcción colectiva convierten a la
gestación de este instrumento en un proceso inédito en nuestra Facultad y Universidad.
Inédito y también ejemplar en tanto la metodología usada contempló oportunidades y facilidades de
participación para todos los integrantes de nuestra comunidad, organizados ya fuera a partir de la
estructura formal de la Facultad, o agrupados de la manera en que cada quien estimó sentirse mejor
representado, guardando los criterios generales previamente aprobados por el Consejo de Facultad. El
diseño del proceso garantizó que la opinión de un estudiante recién ingresado, la de un funcionario o la
del Decano, tuvieran el mismo peso y canal de expresión.
Cada uno de los integrantes de la comunidad tuvo a su alcance la posibilidad de expresar su idea, de
ejercer su liderazgo o su poder de convicción sobre los temas que estructuran el PDI que presentamos.
Y esto tiene que ver con un sentido profundo de cómo vemos lo público: somos una universidad pública
no solo en términos de su propiedad o adscripción al Estado de Chile, lo somos por sobre todo pues lo
público implica que nuestro desarrollo y conducción debe obedecer a un interés común donde se
amalgamen los intereses particulares y no a la inversa.
La formulación y puesta en marcha de un PDI para una institución como la nuestra es una tarea mayor y
por lo mismo, llegados a este punto de inflexión para nuestra Facultad, la satisfacción de la comunidad
es muy legítima. Hemos construido un documento con alcances objetivables y medibles en su
cumplimiento integral. Trascender las declaraciones y materializar lo que se consigna en este
documento es por cierto una labor cuyo éxito dependerá del aporte y compromiso de toda la
comunidad. Con la aprobación del PDI 2016-2025 por parte del Consejo de Facultad ocurrida el 9 de
marzo recién pasado, iniciamos una etapa en la que este documento debe transformarse en el principal
insumo para los planes de desarrollo locales.
Es evidente que por sí solo este documento no es suficiente, en tanto más allá de las declaraciones e
incluso de los indicadores que son imprescindibles para medir el avance de la organización, el desafío
más importante dice relación con la honestidad con la cual nos miremos y con la cual miremos el
entorno. Debemos exigirnos ser coherentes y consecuentes con el real significado de nuestra Misión y
Visión, con nuestros Valores, y desde allí trabajar para cumplir así los objetivos que nos hemos
impuesto.