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codo, etc.” (Corporación Ciudad Accesible, 2014, 44). La dificultad de acceso a las salas de
clase para EsD en la Facultad de Ciencias está dada porque la mayoría de las puertas
cuentan con “pomo”, cuyo sistema de apertura no es apropiado para personas que tienen
dificultades para asir la muñeca, por lo tanto se hace necesario cambiarlas.
En la implementación de un baño para PsD según
la
Guía de Consulta de Accesibilidad
Universal
, resulta clave la sencillez y la normalidad en el diseño, en un espacio libre de
barreras y escalones desde cualquier punto de la edificación y en su diseño debe
considerarse las dimensiones y distribución adecuadas; estos aspectos son: a) La silla de
ruedas debe poder girar y maniobrar en un diámetro de 150 cm en el interior del recinto.
Este espacio libre se considera entre los 0 y 70 cm de altura. (b) Las áreas de aseo y baño
deben considerar pisos antideslizantes. (c) El inodoro requiere barras de apoyo para poder
realizar maniobras de transferencia. (d) Es importante contar con ganchos para colgar
muletas o bastones. (e) Los muebles sanitarios deben tener alturas adecuadas (Ibíd., 56).
A partir de los resultados del análisis de accesibilidad de la Facultad de Ciencias, se
realizaron algunas modificaciones estipuladas como prioritarias en el informe, para
mejorar el acceso del EsD a espacios claves para su desenvolvimiento académico y la
participación en el campus universitario. Entre las intervenciones que requirieron de
mayores recursos -aportados por la misma Facultad- se encuentra la implementación de
un baño adaptado en el pabellón G, sector donde se realiza la mayoría de las cátedras. En
todo momento fue clave la acción coordinada entre la Facultad, el PAED y la participación
del estudiante que ingresaría a la unidad académica.
En otro plano, respecto de las problemáticas de salud mental, la Facultad declara que
otorga apoyo psicológico a través de libre demanda, es decir, aquella solicitada de manera
voluntaria, pero no se cuenta con derivaciones específicas o monitoreo de casos. Cabe
notar que la Facultad reconoce que previamente al ingreso del EsD en 2015, no había
desarrollado iniciativas en este ámbito y este caso les ha permitido pensar la accesibilidad.